Esto multiplicado en el conjunto del estado supone que cerca de un millón de familias se encuentran en esta dramática situación.
El pasado viernes escuchando un líder de la "luchadora" central sindical CC.OO., nos aseguraba que el sindicato no va olvidar a los trabajadores sin empleo y que exigirá mas ayudas a los que vayan agotando las prestaciones sociales, y abogan por un pacto social, con los empresarios para mitigar los efectos de la crisis, un pacto que los capitalistas no quieren ni tan siquiera escuchar, aprovechando su poder sobre el gobierno para obligarle a plegarse a sus condiciones.
Los sindicatos siguen sin enseñar los dientes, y permiten que en muchos centros de trabajo, los empresarios comiencen el chantaje de presionar a los comites de empresa para congelación de salarios y en muchos casos rebaja de sueldos, bajo el seguidismo de los enlaces sindicales.
Aseguran que cuando pase la crisis se compensará, pero ahí alguién que aún cree en ellos?
Mientras tanto se sige destruyendo empleo, y se buscan soluciones puntuales para continuar con el mismo sistema economico que generan gasto público para sanear las grandes entidades financieras sin exigir que estos reviertan en los mas damnificados por la catástrofe humanitaria que asola nuestro país.
Mientras tanto eso damnificados por este tsunami financiero, hacen encaje de bolillos para sobrevivir con dignidad, pero creo que con ocultar su situación por vergüenza, no simplifica su situación, y necesitan ser visibles para que puedan ser escuchados por los dirigentes políticos.
Que podemos esperar de un dirigente, como el secretario general de CC.OO en Andalucía, Francisco Carbonero, que ni tan siquiera canta la Internacional con el puño en alto.
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